Desde el castillo de la isla de Cabrera. Julio 2006.Desde aquí te miro y pienso: este es mi sitio. Mis pies pisan rocas cargadas de historias, con sus fisuras y desgastadas por el viento y el tiempo, pero firmemente agarradas a la tierra.
Aquí puedo esconderme tras las almenas y asomarme a espiarte, a admirar tu furia, o tu calma, o a compadecer tu soledad. Desde aquí, veo tu vaivén incierto, tu incansable movimiento, oigo tu música a veces divertida, a veces tan trágica y pienso: este es mi rincón.
Me asomo a este balcón, agarrada al quitamiedos y dejo que me lances bolas de olores salados y de aire fresco. Pero aquí, a este lado de la reja, no podrás llegar para hacerme daño. Desde aquí yo decido cuando quiero bajar a sumergirme en tu abrazo azul, y cuando no quiero ni siquiera mirarte.
Este es mi lugar, desde donde disfruto de ti, sin miedos.
5 comentarios:
Donde yo vivo no hay mar...pero hay gente que piensa que está escondido debajo de los adoquines, con todos sus ronroneos y su húmedad salada...y las gaviotas gritan por encima de los tejados...
que suerte sentir que tus pies están justo donde quieres que estén...
bico.encantada de conocerte.
En el Tejar pude ver tus fotos en vivo. ¡Cuánta energía! ¡Cuánto lirismo! ¡Cuánta belleza!
Y ese es justo el lugar, para disfrutar, en el que no existe el miedo. Y parece tan sencillo, pero...
LLego sin invitación, de link en link,y no sabes cómo me ha encandilado todo ese mar que abarcas aquí. Un placer.
Mira que la foto es buena... pero el texto es casi, casi más aún. Exquisito. Po
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